En esta y épocas pasadas las alianzas han sido una herramienta empresarial que coadyuva a obtener beneficios y ganancias.
Definiremos primero que es una alianza comercial:
Es un acuerdo entre organizaciones o empresas, que puede ser tácito (acuerdo de palabra, no formal) o explicito (formal, con documentos escritos legales que lo expresan), con la finalidad de potenciar las capacidades de las organizaciones en cuestión, de tal manera de aumentar las utilidades y la competitividad de las empresas.
En palabras simples: es un acuerdo para ayudarse mutuamente y así triunfar sobre la competencia.
Podemos hablar de una Alianza Estratégica, que es el acuerdo entre dos o más empresas en el que cada empresa aporta cualidades o características que la otra necesita para un fin que puede ser común o diverso, no es requisito que ambas tengan el mismo fin, en este contrato las partes no invierten dinero, pues lo que aportan como ya se dijo son cualidades o características; por ejemplo:
Dentro de algunos establecimientos de Office Max existen oficinas de paquetería que usan las instalaciones de la tienda para recabar los envíos, en este ejemplo claramente la intención de office Max no es hacer envíos, sino recibir clientes que además de hacer un envío pueda consumir productos y por parte de la empresa de paquetería su intención es contar con un lugar en que puedan estar más al alcance de sus usuarios a un bajo costo con una buena imagen.
Coinversión. En este tipo de joint venture las empresas unen esfuerzos para un negocio en común y a diferencia de la Alianza Estratégica las partes invierten dinero o bienes para el fin común que es obtener ganancias.
¿Cómo empezar a hacer una Alianza?
Primero. Reconocer que un empresario no lo puede todo, que si necesita ayuda, soporte, o infraestructura de los demás.
Segundo. Que tenga bien clara su misión, su visión, que sepa en qué negocio esta.
Tercero. Que siempre se esté preguntando cómo le hare, como hacer que esto salga más rápido, como ser como los grandes, platicar lo que los demás empresarios.
Cuarto. Estar consciente que en cualquier momento, se puede presentar la oportunidad, no dudarlo, decirlo en ese momento.
Quinto. Después de varias platicas, conocerse y conocer cuál es el alcance de ambos, que tipo de contrato se desea celebrar.
Siempre por escrito es mejor y si se hace con un abogado tendrá más contundencia en lo legal y fiscal.
Así que, Sra. y Sr. Empresario:
Es tiempo de Alianzas, ponga lo mejor de las partes y vera como trabajar en una alianza le dará mayores beneficios.
Luis Gerardo Inman Peraldi
