Todos los empresarios para poder crecer tuvimos que
delegar, ya que al inicio de un negocio o empresa no debes o no puedes hacer
todo a la vez.
Cuando inicia la operación de la empresa, la principal barrera
para delegar es la cuestión económica y esto solamente se justifica cuando no
tienes equipo, sin embargo el hacerlo todo, no te deja concentrarte en lo
importante y terminas perdiendo oportunidades.
Delegar actividades a otros miembros de tu organización
es un requisito básico para crecer, y crecer en la estructura del negocio y sobretodo
en ventas.
El primer requisito del proceso de delegar es tener
confianza, la pregunta es: ¿cómo? sólo intenta perder el miedo. Para perder el
miedo lo más sencillo es dejar por escrito y claramente las actividades en las que
quieres que te apoyen, que controlen y
los resultados que deseas.
Si no queda claro y entendido esta parte de delegar actividades
a un subordinado y si no ha cumplido con los objetivos deseados, seguramente el
emprendedor dio por hecho que así se tenía que llevar las cosas, que así era lo
que se suponía y termina cambiando a la persona o el peor escenario lo liquidas
y empezar otra vez.
Por otro lado fíjate bien a quien delegas, observa bien
sus capacidades y sus limitaciones.
Después de establecer políticas, procesos y
procedimientos bien claros al delegar hay que fijar el cuanto, y con qué
presupuesto cuenta la persona que le vas a delegar.
Invariablemente el cuándo hay que determinar; esto
significa ¿En qué tiempo quieres que los resultados se den?
Y sin duda Sra. y Sr. Empresario para tener una
delegación de actividades exitosa, debemos tener una constante supervisión y
observar el avance.
Para finalizar el emprendedor o empresario quiere
replicar su propio estilo, que nos reporten como nos gusta y que la persona
responsable adopte el estilo que nos agrada, ¡error!
Sra. y Sr.
Empresario, olvídense del cómo y enfoquemos en el qué y el porqué.
No perdamos de vista los resultados.