martes, 6 de agosto de 2013

LA COSTUMBRE DE TOMAR RIESGOS


Esta colaboración está dedicada a todas aquellas personas, y en especial a las y los empresarios que tienen la costumbre de tomar riesgos, las y los empresarios que tratan de cambiar su entorno para mejorar y sobre todo aquellos que no se quedan en el intento.

El común denominador en las pláticas con los empresarios fue que el 1er. Semestre del año fue difícil, que las ventas no fueron las planeadas, que no hubo liquidez, que no se desplazaron los inventarios y muchos factores más; inclusive que el Gobierno no ejerció su presupuesto, en otras palabras, no soltó el dinero!

Para algunos empresarios esto les obligo a salir de la zona de confort, mientras que para otros solo extendieron su zona de confort!
La zona de confort es cuando, te estancas en lo que es fácil, no haces cambios, no tientas al destino, no tomas riesgos y lo peor es que crees que es lo natural y caes en lo cotidiano donde te sientes cómodo, donde crees que todo lo dominas y da como resultado que tus habilidades, conocimientos, actitudes y comportamientos son parte de tu zona de confort.
Para muchos salir de la zona de confort es entrar a la zona del peligro y llega a convertirse en pánico que inclusive no salen a vender fuera de su ciudad, de su estado y menos aun que se atrevan a pedir un crédito para crecer, y es cuando entre las personas negativas que a manera de consuelo victimarios dicen:
¡No salgas, ve como está la inseguridad!
No te endeudes, ¿cómo pagaras el crédito?

Con esta actitud de no salir de la zona de confort lleva al miedo a perder lo que tenemos y lo peor a desconfiar de lo que puedes hacer.
Esto conlleva al miedo,  al que dirán, miedo a fallar, miedo a equivocarse, y  miedo al ridículo.
Al reconocer y gestionar estos miedos te sirve para saber donde estas parado. Analiza tu presente, crecerá tu autoestima, saca tus valores, haz memoria de tus éxitos pasados para auto motivarte, recuerda que nadie te hará cambiar, solo está en ti decidir si dejas la zona de confort!
Reconoce que no todo lo sabes, ni todo lo puedes, busca asesoría y rodéate de gente exitosa.

¡Arriesgarse es perder un poco, no arriesgarse es perderlo todo!

Luis Gerardo Inman Peraldi
6/08/2013

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