Recientemente tuve una reunión
con una persona miembro de un consejo consultivo que nuestra empresa ha tenido
en diferentes periodos y dentro de los puntos a tratar obviamente me preguntó
acerca del personal y en especial de uno que tiene mucho potencial.
Y la pregunta al respecto fue
clara y precisa. ¿Qué estás haciendo para que fulano sea cada vez mejor líder?
Mi respuesta inmediata; estoy en eso, lo estamos apoyando todos los directivos
y los ojos están puestos en él, se le está capacitando y se le otorgó el poder
organizacional para lograr ser un líder.
Mi querido lector, no solo
requiere un colaborador de estos elementos, que sin duda son valiosos para que
esté con los pies bien puestos para asumir un puesto.
Un buen líder siempre deberá
estar con actitud, ser proactivo, capaz de llevar soluciones ante la
problemática que se presente, alguien que debe de estar en constante
crecimiento, y sobre todo que en cualquier circunstancia, evento o junta, sea
adaptable y capaz de interactuar con los demás sin prejuicios para trabajar en
equipo.
Además de que cumpla con las
siguientes características: honrado, puntual, disciplinado, comunicativo, saber
delegar, estratega y deberá de tener la capacidad de poder actuar bajo presión.
No es fácil encontrar todas estas cualidades en una sola persona.
Hay diferentes estilos de
liderazgo; desde el estilo impositivo, que son los que tienen el poder absoluto
sobre los demás, hasta el estilo carismático, que inspiran a los demás pero al
final de cuentas cree más en sí mismo que en su equipo de trabajo.
El estilo de líder que deseamos
todos los empresarios, es el líder natural, que es aquel que ya conoce la
empresa, ha surgido entre los demás empleados, en otras palabras el líder
natural cuenta con las habilidades necesarias y al mismo tiempo cuida de los
objetivos económicos y sociales de la empresa.
Una buena práctica de un líder
natural es estar pendiente de su equipo; el ejemplo a tomar es cuando sus
colaboradores se encuentran en diferentes ciudades, el hablar dos veces por
semana por teléfono en conversaciones cortas, informativas, eficaces pero sobre
todo al final de la llamada decirles: “¡Tú puedes!, logramos la meta, serás el
número uno, vamos por esa solución, etcétera. En otras palabras, es apapacho
con dirección.
Sra. y Sr. empresario la mejor actividad
que debe y puede sentirse como director es formar líderes en su empresa.
Finalmente les comparto dos
frases que refuerzan la actividad de liderazgo.
“Atiende a la gente, que ellos
atenderán tu empresa” John Maxwell
“Mi trabajo no es ser agradable
con la gente. Mi trabajo es tomar a estas grandes personas y empujarlas a ser
aún mejores” Steve Jobs
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