Entre los
empresarios comentamos que el manejo del personal es muy importante e
imprescindible y es de suma importancia tener mucho tacto cuando queremos hacer
cambios.
La resistencia
al cambio es una constante en cualquier equipo, siempre existe el que tiene
ánimo, el que se apega a las reglas, el que lo toma con actitud, sin embargo
dentro de un equipo existe personal que le cuesta trabajo adaptarse al cambio.
En otras
palabras, hay personas que les cuesta trabajo tener la capacidad para adaptarse
a los cambios.
Voy a
establecer con un ejemplo, la formación de un equipo de trabajo que realiza
cierta actividad y que los llevará a salir de su zona de confort, y que sin
duda los llevara a resultados mejores en productividad.
En el trascurso de
las etapas vamos observando dos variables en moral y productividad.
En la etapa 1
de formación de equipo se establece una comunicación asertiva y clara para
poder trasmitir el qué y cómo, revisando si el procedimiento queda entendido por
parte de los participantes. (En esta etapa la moral empieza muy alta y la
productividad baja.)
En la etapa 2,
se llega al conflicto, el equipo encuentra desajustes, hay barreras entre ellos
que impiden que el equipo llegue a una dirección establecida.
Ante esta
situación la moral del equipo baja y la productividad se mantiene pero en
niveles bajos.
En la etapa 3
de normalización, el equipo se entiende, las reglas de cambio se establecen para
lograr un objetivo conveniente para todos, se ve el progreso y animo entre
ellos y por consecuencia la moral y la productividad van paralelos
ascendentemente.
Finalmente la
etapa 4 es de productividad donde ya se tiene un ritmo de trabajo, con
dinamismo, se aclararon las dudas que había en la etapa de conflicto.
En esta etapa
se observa claramente que si se pueden cumplir los objetivos para llegar a los
resultados planteados en la fase primera.
Obviamente en esta
fase la productividad y la moral van en la misma dirección y en ascenso.
Sra. y Sr.
Empresario, hacer cambios en tu organización no es fácil y más si no cuentas
con el experto en manejo de personal, no dudes en contratar a un profesional.
“Yo hago lo que
tú no puedes, y tú haces lo que yo no puedo, juntos podemos hacer grandes cosas”.
Madre Teresa de Calcuta.
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