Que quede claro, a través de los vendedores se ingresa la
mayoría de las ventas de una empresa.
Usualmente otro departamento de la empresa diría: “Los de
ventas no cumplen con sus horarios, se la pasan en citas en cafés y
restaurantes, vienen de vez en cuando a las oficinas y además meten altos
viáticos.”
Un vendedor puede ser muy querido por sus cierres de venta,
así como lo contrario si no vende según lo que indica su presupuesto.
Hemos definido los diferentes tipos de vendedores según sus
habilidades y conocimientos del proceso de venta, sin embargo, según mi punto
de vista hay en juego algunas variables que en mayor o menor proporción
desarrollan los vendedores y que les permite alcanzar el éxito.
a) Disciplina en su metodología.
b) El vendedor tomador de riesgos.
c) El que sueña en una meta y la persigue hasta lograrla.
a) El vendedor
disciplinado, es el que domina desde el principio el proceso de venta y que
además su mejor amigo es el CRM por sus siglas en inglés (Customer Relationship
Management) que involucra la gestión con los clientes. Es un software que te
ayuda a dar seguimiento puntual al momento de vender y crear una relación con
tus clientes.
b) El vendedor tomador de riesgos, es aquel que toma la
decisión de otorgar un descuento extraordinario a un cliente al inicio de la
relación para engancharlo o enamorarlo para después vender mejor, sacrificando
su comisión si así lo determina la Política de Venta.
Incluso hasta sobrepasarse en el gasto de los viáticos y
está dispuesto a poner de su bolsa si es necesario.
c) Por último, el vendedor que se fija una meta, es el que
cada día hace algo para llegar, para abonar a que cumpla. Es aquel que da
seguimiento a una venta ya sea por llamadas, mail, whatsapp, etc.
Por supuesto, es alguien que tiene sentido de organización
para una correcta gestión de la información y que le sirva para enfocarse en
alcanzar los resultados.
¿Y por qué menciono al vendedor que sueña?
Porque es aquel que se pone un objetivo a cumplir, que en su
escritorio, en su closet pone una figura, imagen o fotografía de lo que desea
tener: una familia, vacaciones al extranjero, un auto deportivo, una casa, etc.
¿Tú te consideras un vendedor soñador?
“Los límites de mi lenguaje significan los límites de mi
mundo”
-Wittgenstein
Filósofo austriaco.
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