CAMPO DE SUEÑOS

La tierra es para quien la trabaja.

Fue hace muchos años que Emiliano Zapata Salazar fue el que lucho porque la tierra fuera de quienes la trabajan con sus manos.

Fue la herencia que les dejo la Revolución Mexicana a los campesinos y con otra frase en ese tiempo:

“Tierra y Libertad”

Fue como para darles la bendición de que les fuera bien para ese campesino, sus hijos, sus nietos, hoy para los bisnietos es solo un “qué hacer” que no quieren hacer, es como un “seguro de pereza”.

Es muy interesante observar la relación entre la gente del campo y su labor en el sentido que si a un campesino se le preguntara “si usted tiene dos hijos, y uno de ellos termino la primaria y el otro no, ¿A cuál de los dos les dejaría la parcela? Este ejidatario elegiría al hijo no preparado. Desde su perspectiva, al que se preparo, al que estudio poco o nada contribuía a sacarle provecho a la tierra.

Para sacar provecho de la tierra hace falta cultivarla con inteligencia. Y un Gobierno que visualice al campo no como un “cosechado de votos” sino un organismo rector que de las mejores semillas a los lugares geográficamente hablando con las condiciones climáticas adecuadas.

La política agraria mexicana ha dejado sin respuesta a las necesidades reales y la competencia internacional.

Si se tiene agricultura de riego, la propiedad de menos de 20 hectáreas no funciona; si se tiene agricultura de temporal, se necesitan unas 150 hectáreas como mínimo; para pastizales, se necesitan mil hectáreas al menos, todo para que realmente sea un negocio competitivo a nivel internacional.

El Gobierno ha apoyado más en los últimos 10 años al campo, pero no ha sido suficiente, solo ver como el Gobierno Brasileño ha apoyado a los cultivadores de soya. Brasil cuenta con una región llamada Soyalandia en el Mato Grosso.

Estudiaron investigación de granos, ciencia del suelo, planeación regional y genética animal.

Existen innumerables problemas del sector agrícola – ganadero en México:

· Agua, presas insuficientes. Sacarla de pozos en el Norte del País, cuesta hasta $ 700,000 dependiendo si esta a 100-200-300 mts de profundidad y servirá para suministrar agua hasta 100 hectáreas dependiendo del tipo de suelo.

· Fertilizante. Bastante caro e importado

· Crédito. Caro y selectivo

· Electricidad para el campo. No para todos

· Semillas. Genéticamente mejoradas

· Genética animal. Solo para expertos

Todos estos problemas en parte se desarrollan con tecnología y una visión empresarial inducida al campo y la ganadería.

Si hay oportunidades de cultivar productos muy rentables como soya, frijol, chile, etc.

Si hay oportunidad de dejar de ser una Nación importadora a una Nación exportadora de productos agrícolas.

¡Si podemos cambiar de un campo de sueños a un campo competitivo!

Luis Gerardo Inman Peraldi

06/10/09